Tipos de concentrados de cannabis - The Cut Barcelona

Los concentrados de cannabis son productos elaborados con el Cannabis sativa y el Cannabis indica, que contienen una alta proporción de cannabinoides (CBD, THC y otros compuestos) y de terpenos (compuestos orgánicos de los que derivan los aceites esenciales, responsables del fuerte olor del cannabis, entre otras cosas).

Los concentrados son parte de una tradición milenaria presente en China y la India, aunque han tenido un mayor desarrollo tecnológico a partir del siglo XX.

Los concentrados de cannabis se elaboran a partir de los tricomas, pequeñas glándulas que se encuentran en los cogollos, la parte florida de la planta.

De estos tricomas se extraen distintos compuestos orgánicos de la planta, aunque principalmente THC (tetrahidrocannabinol), responsable de los efectos alucinógenos del cannabis; y CBD (cannabidiol), que posee efectos medicinales y terapéuticos.

Tipos de concentrados

En principio, existen dos grandes tipos de concentrados de cannabis: los que se hacen sin disolventes y los que se preparan con disolventes.

Concentrados sin disolventes

Son las formas más antiguas de preparar concentrados de cannabis, y los más conocidos son el hachís y el kif, pero existen otros concentrados como las charas, el Bubble Hash o el Rosin Hash.

Los concentrados tradicionales se preparan utilizando el tamiz, el calor y la compresión. Por ejemplo, el kif (polen) o kief se obtiene agitando la planta para liberar los tricomas. El hachís se produce calentando y comprimiendo el kif, hasta formar pequeños ladrillos.

Las charas se preparan del mismo modo que el hachís, pero utilizando flores frescas. El Bubble Hash se crea utilizando agua en el proceso de comprimido; y el Rosin Hash es un extracto de resina que se extrae de flores crudas, utilizando planchas y temperaturas que pueden alcanzar los 160°.

Concentrados con disolventes

Son concentrados de cannabis que se logran utilizando disolventes como alcohol, butano, propano y CO2. Esta clase de concentrados se conocen también como extractos o aceites.

Las tinturas y aceites de cannabis, las ceras (Wax), el Shatter (con textura de caramelo), y la resina viva (Live Resin), son concentrados muy potentes obtenidos con disolventes.

Con esta técnica también se elabora el THC concentrado, un proceso complejo en el que se eliminan los terpenos y otros compuestos orgánicos y se obtiene un THC con un 99 % de pureza.

Puedes ampliar esta información en el artículo sobre Concentrados de Cannabis de The High Class.

Peligros en el uso de concentrados de cannabis

Los riesgos de utilizar concentrados de cannabis pueden variar, dependiendo del tipo de concentrado y si es sin disolvente o con disolvente.

Riesgos de los concentrados sin disolventes

Es bueno no olvidar que llevar encima cannabis o venderlo sigue siendo ilegal en muchos países, por lo que el principal riesgo puede ser terminar en prisión.

Los concentrados de cannabis sin disolventes, como el hachís o el kif, que se consumen por inhalación, pueden producir cáncer eventualmente; sobre el consumo de altas concentraciones de THC también hay advertencias sobre sus efectos neurológicos a medio plazo.

Riesgos de los concentrados con disolventes

Es importante utilizar aceites, extractos, ceras y resinas cuyo proceso esté debidamente certificado, ya que son resultado de una combinación con sustancias peligrosas para la salud, como el butano y el propano (en menor medida el alcohol).

También es importante recordar que los concentrados de cannabis con THC, así como otros productos del cannabis, siguen siendo ilegales en España. Por esto último es importante que tengas el máximo conocimiento posible. Si eres miembro de nuestra asociación de cannabis en el Raval, te invitamos a que resuelvas tus dudas con alguno de nuestros colaboradores.

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